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Tantos locos juntos

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No es fácil venir a Seattle. Desde Miami, es un vuelo de seis horas, en un avión pequeño, sin grandes comodidades. Tampoco fue fácil convencer a mi esposa para viajar a Seattle. Ella quería volver a Los Ángeles. Adora esa ciudad. De vez en cuando se encuentra con el cantante Justin Bieber en la piscina del hotel. Conversan brevemente como si ambos fuesen celebridades. Tiene el buen gusto de no...

El hombre que negaba a su hija

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El expresidente peruano Alejandro Toledo ha sido arrestado en su casa de Palo Alto, California, acusado de recibir sobornos por más de treinta millones de dólares. Lo acusan los ejecutivos de la constructora brasilera Odebrecht, que le pagaron esos sobornos, y un antiguo amigo suyo, Josef Maiman, quien los recibió en su nombre. Está derrotado. Es culpable por donde se le mire. Probablemente...

Mi hermana, la pícara

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Desde muy niña, cuando era gordita y remolona en los estudios, mi hermana Carolina mostraba una inquietante fascinación por el dinero. No tenía sensibilidad por el arte, como mi hermana Dorothy, ni pasión por la política y los deportes, como yo. Su obsesión era el dinero. Como era muy chica para aprender a ganarlo (lo que, por otra parte, nunca aprendió), se dedicaba a adular a la riquísima tía...

Volver a ser un niño

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Era un sábado lluvioso en Miami. Nuestro vuelo a Los Ángeles debía salir a las seis de la tarde. El partido de fútbol entre Perú y Uruguay comenzaría a las tres y media. Para no perdérnoslo, llegamos al aeropuerto a las dos de la tarde, pasamos los controles y a las tres en punto ya estábamos en el salón ejecutivo, frente a un televisor en medio del bar, con la señal del partido, a minutos de...

Las playas del deseo

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Mi mujer es extraordinariamente atractiva. Tiene apenas treinta años. Corre varias millas todos los días. Va al gimnasio sin falta. Cuida su dieta. Se mantiene en espléndida forma. No tiene dos kilos de grasa. Como es natural, siendo tan llamativa su belleza, no le faltan enamorados, pretendientes y piratas que procuran asaltar sus tesoros más íntimos. No por estar casada conmigo deja de tener...

La feria de Madrid

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Mi esposa, nuestra hija y yo nos encontrábamos en la tercera fila del avión que en pocos minutos despegaría rumbo a Madrid, la primera visita de nuestra hija a esa ciudad. Parecía que, contra todo pronóstico, rompiendo una larga tradición de impuntualidad de la aerolínea en que viajábamos, despegaríamos a tiempo, cuatro de la tarde hora de Miami. Nuestra hija estaba levemente irritada, tal vez...

El loro procaz

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-Quiero que el loro esté hablando cuando regrese de viaje -dijo Dorita Lerner viuda de Barclays, antes de despedirse de sus empleadas domésticas y dirigirse al aeropuerto de Lima, donde tomaría un vuelo a Madrid. El loro había sido capturado recientemente en los lujuriosos jardines de su casa. Con toda probabilidad, se había escapado de alguna casa vecina, o sus dueños lo habían echado a volar...

El verano soñado

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Nuestra hija Zoe, de ocho años, ha salido de vacaciones de verano en el colegio. Mi esposa y yo fuimos a buscarla a la escuela. Al vernos, corrió con alegría y nos dio un gran abrazo. Se siente liberada. Ya estuvo bueno de tareas. Ha ganado todos los premios y medallas. Se merece unas grandes vacaciones. Tiene diez semanas libres. Volverá a la escuela a finales de agosto. Esas diez semanas de...

Gente que pide favores

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Un hombre bajo, corpulento, venezolano, de formación militar, con cara de bonachón, me cita en un café cercano a mi casa, bajo la promesa de darme información valiosa sobre la dictadura de su país. Bastante renuente, porque no me gusta salir de casa, y menos para hablar de política, algo que ya hago todas las noches en la televisión, voy al café a la hora pactada. Espero que no sea un espía...

El vendedor de ilusiones

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  A menudo nos ocurre con los políticos algo parecido a los que nos pasa con nuestras antiguas parejas. Decepcionados de aquellos, nos preguntamos: ¿cómo pude haber confiado en esa persona? ¿Cómo pude votar por ella? ¿Cómo no me di cuenta de que era una persona deshonesta, tramposa, miserable, ruin? ¿Cómo fui tan ingenuo en apoyarla, tan ciego en no advertir sus defectos? También nos sucede con...

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